
En el corazón verde de Gijón, en pleno norte de España, se encuentra uno de los espacios naturales más singulares de la península ibérica: el Jardín Botánico Atlántico de Gijón. Inaugurado en abril de 2003, este jardín no es solo un lugar para pasear o relajarse rodeado de naturaleza, sino un verdadero museo vegetal vivo, concebido con una vocación científica, educativa, turística y cultural.
Se trata del primer jardín botánico del noroeste peninsular y uno de los más innovadores de Europa por su planteamiento: en lugar de agrupar plantas de forma generalista, como en los jardines clásicos, organiza sus colecciones en torno al Atlántico norte y sus ecosistemas. Así, el visitante no solo observa la belleza de la flora, sino que comprende su origen, sus usos y su papel en el equilibrio ambiental.
Visitar el Jardín Botánico Atlántico de Gijón es mucho más que dar un paseo entre plantas. Es emprender un viaje sensorial y educativo a través del Atlántico norte, entender cómo funcionan los ecosistemas que nos rodean y descubrir nuestra relación ancestral con las plantas.
El Jardín Botánico Atlántico organiza sus colecciones de plantas vivas en cuatro áreas temáticas basadas en el entorno atlántico, y conserva dos colecciones de biodiversidad esenciales para el estudio y la conservación de especies.
En esta zona se recrean fielmente los ecosistemas propios del litoral cantábrico, incluyendo bosques húmedos, hábitats de montaña y zonas costeras. El visitante puede recorrer una representación viva de los paisajes naturales que caracterizan Asturias, descubriendo la flora nativa y entendiendo su función ecológica.
Aquí, el protagonismo lo tienen las plantas útiles para el ser humano. Es un espacio didáctico en el que se explican los múltiples usos de las especies vegetales: alimentos, medicamentos, tejidos, tintes naturales, condimentos y hasta símbolos religiosos. Una forma de valorar la importancia de la biodiversidad en nuestra vida diaria.
Este jardín romántico es un remanso de belleza y contemplación. Diseñado a finales del siglo XIX por Florencio Valdés, combina especies ornamentales, canales de agua, estanques y puentes con un trazado evocador que invita al paseo tranquilo. Es una de las zonas más fotografiadas del jardín, y un testimonio de cómo el arte y la jardinería se han unido históricamente.
Este espacio propone un viaje botánico a través de los biomas del Atlántico norte, mostrando paisajes vegetales de ambas orillas. Actualmente, están representados los bosques templados de Europa y las zonas boreales de Europa y América del Norte, lo que permite al visitante comparar los ecosistemas de regiones separadas por miles de kilómetros, pero unidas por el océano.
Un auténtico pilar de conservación. Aquí se almacenan semillas de especies prioritarias de Asturias y de otras plantas indicadoras de hábitats naturales de especial interés. Esta labor garantiza la conservación genética y permite futuras reintroducciones en la naturaleza.
Una colección científica de plantas secas que sirve como recurso fundamental para el estudio de la flora ibérica. Entre sus fondos destaca el legado de M. Laínz, uno de los más destacados botánicos españoles del siglo XX. Es un espacio clave para la investigación botánica y la documentación científica.
El horario de apertura del Jardín Botánico Atlántico de Gijón es:
*Abierto los lunes de julio y agosto.
**Último acceso 45 minutos antes del cierre.
El Jardín se encuentra ubicado en Avenida del Jardín Botánico 2230, Gijón (Asturias). Puedes llegar al recinto en trasporte público o privado:
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